Señales de prevención sobre las
autolesiones y el suicidio
Actualmente a nivel escolar y
universitario se vienen acrecentando diversas dinámicas que propenden acciones auto
lesivas en los niños y jóvenes, y en el mundo de la tecnología la difusión de
estas es inmediata y contínua. Por ello es importante aprender a identificar
factores de riesgo detectando situaciones que puedan predecir que nuestros
hijos están tomando decisiones equivocadas.
En relación con lo anterior es
pertinente estar atento a algunas dinámicas sociales como “la ballena azul” y “Thirteen
reasons why” (13 razones por qué), entre otras, ya que hoy en día gozan de gran
popularidad e involucran diversos factores de riesgo.
La ballena azul consiste en un juego que
invita al participante a cumplir con 50 retos, aproximándolo de manera progresiva
al suicidio. Sus retos incluyen cortes verticales y horizontales en el cuerpo,
conductas temerarias y/o poco usuales en horas de la madrugada (subirse al
techo de la casa, sentarse al borde la ventana, ver películas de terror o escuchar
cierto tipo de música, entre otras), encuentros casuales ya sean personales o
por redes sociales con otros jugadores y no hablar con nadie durante un día
entero.
“Thirteen reasons why” es una serie
disponible en Netflix, en la cual exponen las 13 razones que llevaron a una
joven a suicidarse, constituyéndose en un programa que hace apología al
suicidio y que presenta detalles específicos de cómo realizar de manera
“eficaz” un atentado contra la integridad propia además de mostrar de manera
explícita escenas de violencia tanto físicas como sexuales.
Con el fin de prevenir posibles patrones
de comportamiento suicida se invita a estar alertas de las siguientes señales o
alarmas: regalar las pertenencias, hablar acerca de marcharse o la necesidad de
"dejar todos mis asuntos en orden", cambio repentino en el
comportamiento, pérdida de interés en actividades que solía disfrutar, tener comportamientos
autodestructivos (tomar alcohol en exceso, consumir drogas ilícitas o hacerse
cortaduras en el cuerpo), alejarse de los amigos o no querer salir, hablar
acerca de la muerte o el suicidio o incluso declarar el deseo de hacerse daño,
hablar acerca de sentirse desesperanzado o culpable, cambiar los hábitos
alimentarios o de sueño o preparar maneras de quitarse su propia vida (como
comprar un arma o muchas pastillas).
Adicional a estas 2 nuevas tendencias,
existen patrones de comportamiento negativo que desde hace un tiempo han
generado en los adolescentes dinámicas inadecuadas de afrontamiento tales como:
Self-harm la cual consiste en realizarse cortes horizontales en el brazo y
antebrazo o incluso en las piernas, Onicofagia y tricotilomanía que consiste en
comportamientos compulsivos asociados particularmente a situaciones de
ansiedad.
Por estas razones es fundamental
involucrarse de manera activa en los intereses y prácticas habituales de sus
hijos, ya que algunos contenidos a los que están expuestos, podrían orientarlos
negativamente, enseñándoles explícitamente cómo convertirse en jóvenes
disfuncionales y por tanto con una muy baja tolerancia a la frustración e
incapacidad para afrontar posibles situaciones dolorosas en el futuro.
Es nuestra recomendación abrir espacios
de comunicación e inclusión familiar en donde se compartan actividades de
tiempo libre y se construyan vínculos afectivos que fortalezcan la confianza y
la expresión emocional en familia.